El mundo del arpa se conmocionó hace unos días con la noticia del fallecimiento de Victor Salvi, el famoso y querido constructor de arpas. Salvi, nacido en Chicago en 1920, en el seno de una familia italoamericana de músicos y arpistas, empezó a estudiar arpa con su hermana Aida, arpista de la Orquesta de la Ópera de Chicago. Fue arpista de la Orquesta Filarmónica de Nueva York y de la NBC, pero su gran pasión fue la construcción de arpas. Como arpista, estaba interesado en mejorar el instrumento y pronto fundó su primer taller de reparaciones en Chicago.

En 1954 construyó su primera arpa, y desde entonces no dejó de luchar por conseguir su sueño: un arpa perfecta, que mejorara todas las hasta entonces construidas, un arpa con mayor sonido, con más riqueza de matices. Un arpa al servicio de los arpistas. Más tarde se trasladó a Italia y en 1974 estableció la fábrica en Piasco. A pesar del éxito de sus arpas no dejó nunca de investigar y de buscar nuevas mejoras para nuestro instrumento.

A través de  la Fundación que lleva su nombre, patrocinó numerosas actividades arpísticas y ayudó a la difusión del instrumento. Y en 2006 fundó el Museo del Arpa, único de su género, visita obligada para cualquier arpista.

Desde la Asociación Española de Arpistas nos gustaría hacer llegar a sus familiares y amigos nuestro más sentido pésame. Victor Salvi nos dejó el día 10 de mayo, pero vivirá siempre allá donde haya un arpa, y nosotros le recordaremos siempre con agradecimiento y cariño.

Gracias, señor Salvi.

Susana Cermeño

Algunos links sobre Victor Salvi:

http://www.cultureforfriends.eu/article/victor-salvi

https://www.harpcolumn.com/remembering-victor-salvi/